Coronada por la diadema pétrea de los muros,
con el blasón y el pilum, desde la gloria secular
donde el fortín era de águila y lábaro, hasta la fría
paz de los alféizares, surge la ciudad de fosos
arrumbados y vigas al aire, de torres grises
y salmodia en los reclinatorios de una catedral
sin alharaca, ni pan de oro ni rubís en los mantos
de las vírgenes, el silencio y la evocación de un tedeum
sella las comisuras de los labios, retornan el rumor
de una cohorte en marcha y el miedo al finis terrae
en los ojos de unos équites que desfilan entre vítores,
al son de tubas y timbales bajo palios vermellos.
Lugo: antiguamente Lucus augusti, ciudad de Galicia fundada por los romanos.
Pilum: lanza romana
Águila: símbolo que acompañaba a las legiones.
Lábaro: estandarte romano
Tedeum: canto religioso
Cohorte: una de las formaciones de la infantería romana
Finis terrae: en la actualidad Finisterre lugar al que los romanos consideraron el fin del mundo conocido.
Équites: caballería romana
Tubas y timbales: instrumentos musicales que se usaban en Roma
Vermellos: palabra gallega que significa rojos.