domingo, 6 de abril de 2025

Puntos cardinales

 

Pasó el tiempo de los pájaros

que migran al sur.


Soy raíz de piedra,

estatua inmóvil de un norte

sin mañana.


Al este sigues tú,

al oeste mi ocaso.

sábado, 5 de abril de 2025

Los galgos

 

¿Qué persiguen los galgos que corren por mis ojos?


¿Una casa grande,

un automóvil veloz,

un barco que navegue

sobre un mar de oro?


No es eso.


Lo que persiguen los galgos de mis ojos es la luz de la mañana.


Nunca la puedo atrapar, siempre llega antes la noche.



viernes, 4 de abril de 2025

La belleza

 

Así tiembla la fibra que en el interior brota

de la mirada como un prodigio imposible de adivinar.


Su rayo certero se hunde en la raíz del alma

con la eficacia de un bisturí, sacia el color,

encumbra la música, es una imagen que estalla en el corazón

igual que el trueno cuando asola la quietud de la noche.


Convierte los segundos en efluvio de eternidad

si los ojos no consiguen apartarse de la desnudez

que se muestra indócil al núcleo sensible de lo humano,

y llega la lágrima porque el sentimiento de no poseer

indefinidamente la armonía, las proporciones, las formas,

los arpegios de un ideal es causa de un dolor íntimo.


O viene la dicha con su canto efímero de éxtasis

que reposa en el nido de la mirada,

en el placer que llega al oído desde la música como un don de ángeles,

en la naturaleza de la que nace el asombro,

en la perfección de los cuerpos que aún son jóvenes.


En tu mundo que no se muestra, se intuye en la palabra,

en el amor, en la bondad que es perenne en ti

como un árbol de oro que brilla bajo un océano que nadie surca.


Pintora de ángeles


Calma del agua que vierte su racimo de gotas en la serena

quietud de la tarde. Ella pinta ángeles bajo los aleros como

si ateridos de humedad se refugiaran en las cornisas para

convertir en inmóviles sus alas. Ella aún desprende luz de luna

si la llamada de unos ojos recuerda la simbiosis celeste de su piel

con el haz que la medianoche dejó en su perfil,

mixtura que se convierte en fulgor cuando la memoria

repite el eco de la magia de ver la transparencia de la luz

sobre un halo virgen que envuelve el cáliz de un cuerpo

con la rosa alba que la luna deposita en los hombros desnudos

hincándose como flores de nieve en los promontorios mas altivos

de la carne. Calma del agua que moja la testuz de los caballos

en la fontana, paciencia del cristal y sus biseles donde se quiebra

el rimero que fluye hasta el contorno de una ventana en penumbra,

infancia de la claridad bajo la sombra gris de los cúmulos,

paraguas sin nadie como pájaros negros sobrevolando

la corriente de un río insomne, la sonrisa que pintó

para ella un ángel en su impermeable azul con la forma

dorada de un sol de invierno me recuerda que siempre

fue la luz que iluminó la oscura faz de mi alma.

miércoles, 2 de abril de 2025

La fotografía

 

La imagen permanece como si el tiempo fuera

una gota de piedra que cae sobre la fugitiva sed de los minutos.

Inédito fluir de los relojes que nombran el mañana

antes de que el presente viva en la memoria

de quien ya es pasado al sonreír a un objetivo

que cierra su ojo para retener el instante

que nunca será espejo de una realidad inmóvil.

Tu blusa blanca y mi camisa azul, el lugar donde el sol de agosto

reproduce su ciclo de luz, el cielo claro, el trigal como un cabello

de trenzas amarillas que mueve el aire, el infinito horizonte,

la res y las colmenas, el escenario existe, nosotros no,

aunque falsamente perduren en un papel multicolor

la piel joven y la imagen tuya que hoy me sonríe

desde el ayer mientras contemplamos juntos

aquella fotografía que ya no recuerdo quien nos hizo

con la cámara que aún guardas en la buhardilla 

como un tótem que ya no volverás a usar.


lunes, 31 de marzo de 2025

El inocente


Aunque oiga las palabras del odio
su interpretación es distinta
porque no concibe la maldad del sentimiento.

Siempre será un niño que juega,
un árbol que crece hacia la luz,
el agua más pura del más puro manantial.

Cuando alguien señala lo negro él señala lo blanco.

Cree en ti porque eres su amigo
y no es capaz de presentir
la traición ni el engaño
que un día asomará
en el azul de tus ojos.

domingo, 30 de marzo de 2025

Extraviado

 

Te observas por el revés del espejo en el lugar oscuro

donde la claridad no llega a definir el contorno

que delimita tu espacio sin alma.


Y llueven los candiles como flores de la luz

y se desnuda la ola de su espuma frágil

cuando el aire fustiga la efervescencia que mana de sus cabellos volátiles.


Confundes la armonía con el velamen de un barco que va a la deriva,

sales de la sombra a un sol estéril que no calienta tu piel

mientras los ecos de viejas canciones consiguen que nazca la lágrima

en unos ojos sin fe.


A través del vidrio vuelve el azul de un mar herido

por la luz anciana de los recuerdos.


¿En qué vial dejaste las huellas que borró el céfiro de la noche?


Colgado de la pared un dibujo de infancia te mira

y no descubre en ti al niño que fuiste

ahora que todo es negrura en la faz de los espejos.

viernes, 28 de marzo de 2025

La piel

 

Es un mapa donde el silencio extiende su ceniza

de años mientras recibe del sol la suave caricia

del fulgor en los poros abiertos a la luz del mediodía,

la cubren los vestidos de la edad con el traje recién

estrenado de la infancia, la lisa enagua de la juventud

y el áspero organdí que se aja como un delta cuando

la senectud asoma en los pliegues exhaustos de un tiempo

largamente vivido, y es también veladura de órganos,

superficie donde germina el vello, máscara que cubre

con su transparencia el latir de un corazón que sueña.


jueves, 27 de marzo de 2025

El tapiz que me viste

Voy tejiendo con hilos de ansia el tapiz inacabado que me viste,

en él dibujo las islas que recorrí por el mar sin nombre de las horas,

en él escribo las palabras del éxtasis cuando al fin asoma el fruto

maduro sobre el árbol del tiempo con su pulpa abierta, ya en sazón,

después del frío invierno en que la penuria escarchó la rama sin el sol

benefactor de julio lamiendo su piel aún verde de infantil virginidad;

en él pinto las amapolas que nunca vi que no son de color carmín

sino azules como el cielo de unos ojos encendidos de mar; en él grabo

el paisaje que soy con mis ríos de nieve y mis playas de coral, con el jazmín

en el pecho de un hombre desnudo, con la soledad como una lluvia

que cae más allá de mí en el trigal dormido donde mis sueños

son espigas que brotan tras las huellas que dejó el que un día fui

antes de ser hoy la esperanza alegre de un futuro por cumplir.

miércoles, 26 de marzo de 2025

El grito

 

Este incendio de días lúgubres va pesando como un ascua

que no cesa de quemar, la desgracia es un rayo que fulmina

el brote verde de la esperanza, heridas interiores como un tizón

que no sale a la luz abren surcos de temblor en los pechos,

quemaduras viejas nunca cerradas, rojas estalactitas que hunden

sus filos en la tranquilidad del silencio, agrede cada espasmo

del reloj con bisturís de desaliento y sufre la piel, la carne

y el corazón el vendaval del infortunio, la pena del insomne

se vuelve omnímoda y callan las campanas festivas de la alegría

y todo es invierno en los oasis donde la felicidad dormía bajo

el sol de la ventura, un sonido, apenas murmullo, va creciendo

en la soledad de la palabra y nace el grito como un hondo aullido

en la penumbra, inarticulada voz que lleva dentro un clamor

virgen ante el infausto acontecer de la injusticia más cruel.



lunes, 24 de marzo de 2025

Si digo tu nombre

 

Cuando vi la isla

conocí tu nombre.


Pétalos de ámbar

en la flor de un beso.


El volcán de tus ojos

deja ceniza de luna

en mis ojos de niño.


Tu piel se abre

como un fruto maduro

a la luz de la mañana.


Si digo tu nombre regresan

la flor, el volcán, tu piel

y el fruto que al dibujarlo tiene

la forma de tu isla.

domingo, 23 de marzo de 2025

De piedra y agua

 

Húmeda piedra que en el invierno lloras

como una amante abandonada por la luz de un sol esquivo

vierte el aljibe de tu piel en el cristal de los charcos

que reflejan el misterio de la nube, la huida del ángel,

el ciclo del pájaro que torna en círculo y nada en el espejo

que pisará la curvatura de un zapato fugaz, pared de granito

y mica en la testuz que se eleva con las ventanas ojivales abiertas

al aire gris de una tarde colmada de jazmín y lluvia,

manantial que fluye en surco por el sillar enmohecido,

el canto del canalón con el coro del agua en sus entrañas

como álgebra de gotas en la arteria de zinc que doliente

derrama su sangre traslúcida sobre el ajedrez de los adoquines

mientras en el cielo la bóveda gris se arracima en cúmulos

como una esponja irreal que exprime su líquido hasta

que a la frágil fontana llegue el azul que clarea el día.

sábado, 22 de marzo de 2025

Tu vida

Es un puzle que se crea a sí mismo.

Sin ninguna referencia.

Porque tu vida es única
y nadie conoce el paisaje final.

Ni tú que lo vas componiendo poco a poco
hasta que solo sea recuerdo.

viernes, 21 de marzo de 2025

Sueños de colores

 

Colores que vibran en el arco iris a lo lejos sobre un racimo de nubes,

color de pena tu color en los ángulos de tu boca, paisaje de color

en el vientre de la primavera, mosaico de luna gris la medianoche

cuando no hay luz en la ventana prohibida, encendido el color

que fluye como un río entre muebles que nombran la gracia visual

de la policromía en la juventud de las habitaciones, color niebla sin color,

esencia del humo, traslúcida materia del éter, transparencia del color

en el agua que cae sin el ropaje multicolor de un caleidoscopio

en la pupila del niño, amarilla la mies, verde el árbol del ensueño,

azul el pétalo de la flor azul, rojo de carmín en la brevedad de tus labios,

añil la sangre del nenúfar, naranja el fruto de un verso color naranja,

marrón el color que no ha visto otro color que el olvido, magenta

la noche que se convirtió en alba, el color sin color de la lluvia 

en el cristal, blancura del color en la sábana limpia, aurora del color

cuando amanece y yo la intuyo carmesí desde la luz de mi cielo boreal.

jueves, 20 de marzo de 2025

La otra vida

Proyecta una vida que solo dure ciento veinte minutos.


Una historia falsa que sea más real que la tuya.


Un guion siempre inacabado

con pistoleros, espías, corsarios,

elegantes ladrones iguales a ti.


Donde cada principio nazca de un final

y cada final nunca termine.


Donde triunfes como galán o como héroe.


Un film que te salve de tu auténtica vida

que ya no soportas.


El desierto de tu ausencia

En la arena de mi piel no hay huellas de caravanas

ni en el aire que asola mis bronquios hay oasis

que humedezcan el oxígeno ardiente que alimentó

con su flujo la ceniza de mi noche.


Surca la luz el vientre de los espejismos

como un látigo irreal que golpease el horizonte

con un temblor ciego de párpados que sueñan

con icebergs en un mar sin agua ni azul.


Hundo mis pies en tu clepsidra

y avanzo ciegamente por los desiertos del alma

donde no hay un pozo que socorra

a mi voluntad de sobrevivir sin ti.




martes, 18 de marzo de 2025

El solitario

 

Nada queda como residuo del tiempo compartido.

El aire sucede, la voz no escucha otras voces,

la palabra ya no es esgrima de significados,

en los espejos nunca se refleja la multitud,

solo un ser sin sombra descubre la imagen ilusa

de duplicarse en el azogue como un falso ardid

que amortigua el dolor de sentirse único.

Son bisturís de silencio los minutos

que hieren la perpetua canción de los relojes,

siempre hay desnudez aunque se vista de luz la memoria

que nos trae el recuerdo de un pasado en común,

aquella infancia que negaba la soledad,

donde todo era múltiple y no existía

esta sensación de sueño perdido

en la profundidad de un corazón

que ahora teme al futuro.


El puente

 

Solo piedra y sostén bajo el cielo azul de febrero.


Cruzaré desnudo el umbral abierto a la luz

como desvestido de mar

en la duna de un aire sin memoria.


Diez faroles en el pretil donde los pájaros se posan

como vigías que esperan al arco iris

que luce en su vientre

el invisible color de la esperanza.


Hay orillas que son como labios de un manantial

que trae la rosa blanca de la nevada

mordiendo el corazón del río.


Es el río la sangre transparente de los días que fluyen sin ti

hacia el estuario que forma cabellos de agua

disgregándose en la inmensidad sin alma del océano

lo mismo que una voz se disgrega en cien sílabas de olvido.

domingo, 16 de marzo de 2025

Aquel trueno

En el tambor del cristal el viento golpea con el ritmo alegre de una música que hace vibrar la piel transparente de la ventana donde ya no se refleja mi rostro al no persistir la claridad que trajo el alba a mi habitación oscura. Aquí el silencio se hace sombra y pinta en la pared nubes de soledad, cúmulos grises con silueta de bosque, fantasmagoría de borrasca en mis ojos que ven la lluvia como si de ellos brotara un alud de agua bajo la inútil techumbre de los párpados. Regresa el niño que fui al temor de las cicatrices azules en la algodonosa matriz donde ya no está el púrpura que antecede al esférico sol del amanecer, la mañana es un relámpago voraz y el trueno un susurro de ángeles sordos que asusta a la memoria pues sus voces llegan con el timbal ardiente de una algarabía estentórea que recuerda al frenesí ronco del aleteo de una bandada de gorriones que unen sus arpegios múltiples para que en el oído infantil una única nota estalle con estruendo de volcán en la omnímoda paz de los tímpanos.

sábado, 15 de marzo de 2025

Solamente música

 

El mar deja una pátina de sal en el maquillaje de la noche.


Palabras de encuentro, sin subterfugio, devoran la luz,

penumbra que cae como nieve en los labios rojos de los maniquís.


Y son nubes las historias que no se dicen bajo el cielo mudo

donde la ausencia de los pájaros se llevó la canción del alba.


Y se abren puertas y se cierran ventanas y el aire es azul

como un océano en los ojos del tiempo.


Hay un rumor de lirios en los búcaros,

un idioma sin sílabas ni edad,

solamente música que transita el espacio que ocupa

el jardín de tu nombre.



Amanece


En mis párpados está cautiva la sombra de la noche
y en tu cuerpo desnudo el sol extiende su aura,
son testigos el silencio y mis ojos que te ven dormir
vestida de luz como una novia.

jueves, 13 de marzo de 2025

El paraíso

 Introduce la llave en el ojo del bombín.


Gira de izquierda a derecha el mástil

que encaja perfectamente en la hendidura.


Sostén el níquel redondo con firmeza entre los dedos.


Haz la presión necesaria para descubrir que tu mundo sigue ahí,

inviolado.


Solo serán dos giros de tu ágil muñeca para retornar al paraíso.


Un paraíso donde no vivís nadie más que tú y los recuerdos.



miércoles, 12 de marzo de 2025

Así soy

Aunque me busques en la raíz, en el mismo centro del pozo que soy, allí donde la cara invisible de mi luna no deja ver la transparencia de mis actos, aunque te escriba mil veces cada razón que justifica mi proceder, aunque me juzgues por las huellas que voy dejando como migajas de pan por los senderos de los días y la palabra asome a cada pregunta sin la verdad más diáfana en mi rostro, aunque te jure que tengo un corazón que habla por mí y unos ojos que te miran en silencio con la sinceridad de un perro fiel, aunque entre las ruinas de la noche descubras una luz que ilumina mi ser desnudo y no creas que es mi cuerpo el que se muestra a ti sin artificios, solo con un nombre en los labios y una rosa de amor en la mirada, aunque no llore si te veo llorar ni te acompañe con mi sonrisa al despertar del sueño; créeme si te digo que soy así, tal como me ves, transparente como el cristal en el que se refleja el perfil que ahora observas junto a ti, adorándote.




martes, 11 de marzo de 2025

De luz y sombra

 

Ábrete al día como se abre una flor a la luz de la mañana.


Con la alegría de una novia

que entrega al sol

la virginidad

de su sombra.

El beso

 

La noche escribe lenta una oración de labios

que se rozan como si la partitura del amor

necesitara el canto de la lluvia en los alféizares

para sentir el fluido perenne de la dicha que dibuja

un mapa cálido en las alas de dos bocas sellando

el misterio de la eternidad, y es la cópula febril

un baile húmedo de panteras mordiendo la lujuria

del ansia que cierra los párpados en un delirio

fugaz, así el rumor de la fuente enjugando la carne

rosada con la lengua trepadora deslizándose por la cueva

sin luz donde el marfil del colmillo hinca su tridente

en el mar de las papilas hasta el fluir leve de un manantial

que une la silueta de los ríos en una sola cadencia,

en un solo latido de armónica pulsión hasta el éxtasis

que silabea un nombre, simplemente un nombre

que es deidad vertiéndose bajo el farol que adorna

con un racimo de luz la oscura sed de los amantes.

sábado, 8 de marzo de 2025

Tú eres mi sirena

 

¿Y si no hay mardónde la gracia de tu baile

entre ondas de espuma blanca?


Es tan suave, tan armonioso, tan seductor

el canto que en tus labios germina

igual que un cáliz de lujuria.


Un coro de delfines te acompaña por las crestas

invencibles de un océano sin paz.


Rizos dorados que caen sobre tu pecho de añil,

la plata brota de la cintura en sortilegios

que brillan como collares al sol de una luz sin alma.


No anuncias mi nombre en tu isla de coral,

es suficiente el eco indistinguible de una música 

que llega confundida con el rumor del mar

a mis oídos.


Con la aurora te muestras, con el crepúsculo te escondes,

al mediodía cantas, con la voz del ensueño,

y yo te sigo, sin pensarlo.


viernes, 7 de marzo de 2025

El guerrero caído

 

Cientos de batallas regresan a mis ojos cuando los párpados

enrojecen por la sangre vertida en el preludio estéril de mi muerte,

galopa mi caballo sin la grupa del jinete, en el filo de mi espada

agonizan las almas de los vencidos, este fragor de armaduras

fulge como hoguera de exterminio en el ojo del encuentro

frontal de los invictos contendientes bajo un cielo gris de lluvia

que no limpia las extremidades mutiladas vertidas sobre un campo

rojo donde los ríos de la finitud corren como fluido de extinción,

este olor a vísceras abiertas a la luz me llega ahora que, acribillado

por los mastines de la venganza, rememoro mi infancia en el vergel

de oriente bajo palmeras que daban sombra a las tiendas coloridas

donde vivir era solo un juego junto al oasis que me vio nacer,

humareda y calima en lontananza, a mi lado los estandartes

que ya no mece el aire, escudos de pino, lanzas y yelmos,

blasones y medias lunas como trofeos de rendición en montículos

que conmemoran la derrota sin piedad de mis creencias, herido diez

veces, con el estertor en los labios, mis rodillas rozando la tierra verdecida,

golpeo a mis enemigos, mato y me matan en el anochecer de pájaros sin luna;

en este fin cruel solo un recuerdo me asalta, tu carne virgen, tu amor puro,

tu juventud abrazándome y yo en tu regazo, dormido guerrero que reposa

en la calidez de aquel vientre que me regalaba la paz de los sueños.

jueves, 6 de marzo de 2025

El banquete de Heliogábalo


Bendecid al coro de los faunos que arriban con la música de la tuba

en los labios rojos, ah! deidad del sol que invita a mi carne al flujo procaz

de las estrellas, pedestales en la roca que vestí de guirnaldas, coronas y alelís:

ven tú frágil paloma que te vistes con la túnica vaporosa que transparenta

los senos y el vientre lujurioso, canta oh! sátiro tu canción festiva

tras el banquete de sabrosas viandas, de vino carmesí en las ánforas

de barro donde el dibujo colosal de los miembros se eleva hasta ensartar

la vulva blanca, corre el viento por la estancia con ecos de ninfas en la voz

que aúlla de éxtasis, frenesí de luna que rieló en la noche, altas estatuas

de un dios solar, vanagloria de la luz que vaga por mi ojos cohibidos

por las danzas y la armonía salvaje del furor, soy césar de nimbo blanco,

pámpanos entre los cabellos vagamente rizados por el aire vespertino,

golondrinas y pájaros sin negrura por el cielo simbolizan la gloria radiante

de la claridad, pesadumbre de otros dioses que imploran un pedestal

junto a mi cama de niño, presagios de aves cuyas entrañas predicen

mi nostalgia por las áridas tierras de El-gabal, racimos de sol en las higueras,

los olivos, el río donde lavó madre mis pies infantiles, nunca entendieron que la luz

es de oro y el destino un rayo que barre todas las creencias que hirieron

sus párpados ante el rostro etéreo del inmortal dios del alba y los amaneceres

púrpura, el disco que amarillea imperial y da calor a la vida de los hombres.

miércoles, 5 de marzo de 2025

Quemaduras


¿Hasta cuándo en mi corazón su latido insomne
que funde la placidez indolora
con el hierro candente del infortunio?

Heridas de amor que queman los sueños,
lame el fulgor de la hoguera mi piel desnuda
con su lengua de olvido en la necrosis que forma
un lago negro en el jardín de la esperanza.

Las invisibles llamas interiores son colmillos
que muerden las vísceras como un animal muerde
en el cuello de la noche para ver la sangre de la luna.

Un círculo marca el límite de su beso en la extremidad incauta.

Allí no hay mas que sombra.

martes, 4 de marzo de 2025

Sintonicemos los relojes

 

Encontrarse en el lugar medido por la razón del tiempo,

en el espacio y la luz que nos unen

bajo el sol que anuncia la mañana.


El tren del futuro es el nuestro

¿a qué hora llegará a la estación final del olvido?


Fijamos una cita, sin más,

la plaza con la fuente sin agua,

el banco azul y la espera

junto a los pájaros del frío.


Sintonicemos los relojes,

ya que nos aguarda

toda una vida en común.


lunes, 3 de marzo de 2025

Vehículos

 

¿Viaja con ellos mi alma,

o no es posible

porque mi alma tiene raíz

y vive en lo más hondo

de mi pensamiento?


Hoy aquí, mañana allá,

lugares y espacios

se suceden como sombras

que atraviesan el perfil de mis ojos.


Surcan aire, mar y tierra,

para ellos la lejanía es un destino por cumplir,

la llegada un punto en el horizonte

que de pronto habitas

sin darte cuenta.




domingo, 2 de marzo de 2025

En el fondo de mis párpados


En el fondo de mis párpados se rueda un film

con los días que transcurren

mecidos por las olas del tiempo.


Nadie más lo verá, soy a la vez espectador y protagonista,

no escribo el guion ni le pongo música,

no sé quién me acompañará

ni qué caminos transitaré.


Si el escenario del presente será también el escenario del futuro,

si el papel que represento dejará huella en alguien

o por el contrario solo habitará el olvido.


Sé el final pero no el cómo ni el cuándo,

en qué lugar,

de qué manera.


Dentro de mí hay una cámara que recoge cada instante que soy

y lo proyecta en el cine que oculto

en el fondo de mis párpados.



sábado, 1 de marzo de 2025

El soñador

 

A cualquier parte podrás ir por el cielo de tu casa


Arriba en la techumbre hay estrellas y meteoros,

una luna próxima y flores celestes como rosas de luz.


El sol lamerá tu plumaje con los rayos vivos del día,

no habrá sombra en el azul

ni horizonte que a tus ojos se revele imposible de alcanzar.


Y así, desnudo, con el frío de la libertad mordiendo tus alas,

volarás hacia más allá de lo que ves

hasta el mismo centro

de tu yo desconocido.

viernes, 28 de febrero de 2025

La voz

 Es un jilguero que atraviesa el aire y escribe palabras en la luz con la espuma del tono llegando a los oídos como un código que hay que descifrar en un diálogo donde el lenguaje es un pasajero de la verdad o de la máscara que urde historias tan frágiles que jamás se cumplirán, modulación de la palabra en el recipiente del sentido que diseña hilos de entendimiento, a menudo seductora igual que un labio cuando pronuncia las palabras como si fuera un ruiseñor bajo la noche cálida de un agosto lunar, grave como un río subterráneo, estridente como el chirrido del metal cuando lo afila el miedo, coro infantil en los parques y en los colegios, armonía de la canción si las notas son pájaros que vuelan libres por los cielos donde el silencio se inclina ante la belleza que inunda el corazón con la melodía de un ángel en las cuerdas vocales de un interprete que nos emociona sin saber porqué, grito procaz o susurro, en la confidencia flor de seducción, en la vejez ahogo de un manantial que apenas fluye, y si te hablo a ti un pedazo de amor o de amistad, con ella, y por ella, la palabra siempre canta.

miércoles, 26 de febrero de 2025

Nieve y luna

 

Cuánta ternura en la nieve que cae bajo el asombro del día.


Así eres tú, silencio en la quietud que se disgrega

formando pétalos de agua, flor lívida tu piel blanquecina

con racimos de escarcha en los pechos, rocío que moja

el ardiente flujo de la pasión y deja un rictus en el rostro

de filamento herido por la fría nube de un pálpito helado.


La nieve calla su historia de tapiz y nombra la cadencia del aire

donde baila la hilatura de los ejércitos mudos,

aquellos que colonizan los paisajes de marzo

con las flores frágiles de su cabellera alba.


Nieve sin arpegios, nieve de ángel en mis ojos que lloran nieve.


Luna, ven a mí, no dejes caer esta lágrima de hielo que asoma

en las pestañas como un dibujo de cristales hexagonales

derramándose por el jardín sin abrigo de la hipotermia.